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¿Una bicicleta tipo ciclocrós para el gravel? porque no

Por Jaime Villasana Dávila

El ciclocrós es una disciplina del ciclismo poco conocida en Latinoamérica más no así en Europa. Incluso en algunos países como Bélgica y Holanda es la más popular. El ciclocrós tiene sus orígenes en Francia a inicios del siglo XX y fue ahí donde se realizaron los primeros campeonatos de la disciplina.

¿Pero que es ciclocrós? Es competir en una bicicleta algo parecida a una bicicleta de ruta con características propias (abajo los detalles) sobre un circuito con diferentes superficies como asfalto, arena y pasto. En las competencias de invierno se compite hasta sobre nieve. La temporada de ciclocrós regulada por la UCI inicia en octubre y termina en enero, por lo tanto se le considera una disciplina de invierno. No obstante, en países como EE.UU. o Australia se compite durante todo el año.

Cuadro y geometría

El diseño y geometría del cuadro de una bicicleta gravel respecto una de ciclocrós tiene sus diferencias. En algunas marcas esto es más notable. Algunos dirán que el diseño y geometría de una ciclocrós es más similar a una de ruta que a una gravel. Puede ser, dependiendo de la marca. 

Tomo por ejemplo a Giant cuya bicicleta de ciclocrós es la TCX y en gravel es la Revolt. En la siguiente imagen podrás ver como sus cuadros son marcadamente diferentes. En la TCX (color naranja) la distancia entre ejes para talla M es 1020mm mientras que en la Revolt (color púrpura) es 1030mm. La razón de ello es porque una bici de ciclocrós debe ser más responsiva al aceleramiento y entre más corta lo será más.    

Giant TCX (abajo) tiene un diseño muy diferente a la Revolt. Imagen: Giant.

Otra diferencia marcada es el tubo superior; en la TCX es casi paralelo al piso para facilitar el echártela al hombro durante una competencia y al pasar por superficie de lodo o arena. En la Revolt la caída es más pronunciada para darle más comodidad y estabilidad al ciclista. Aclaro que hay también hay bicicletas gravel con un tubo paralelo al piso pero usualmente son las de competencia, dado que ello te permite una posición más inclinada o agresiva.

Una diferencia igual de sobresaliente es la caída del eje del pedalier. En las ciclocrós es menor y en las gravel es mayor. A más caída más estabilidad pues tus pies están más cerca del piso. En las ciclocrós la caída es menor debido a los obstáculos que deben brincarse. En la TCX la caída es de 60mm y en la Revolt de 80mm.

Los dos cuadros son igual de robustos al tener que soportar altos grados de estrés y tensión en sus tubos. En este sentido a la ciclocrós podrás meterle buena caña como lo haces con una gravel. De hecho un buen porcentaje de competidores de gravel usan bicis de ciclocrós, aunque con las salida de las gravel de competencia dicho número ha ido disminuyendo.   

Neumáticos

En las competencias de ciclocrós el grosor máximo de neumático permitido es de 33c mientras que en el gravel no hay límite. El ciclista usa el grosor según la superficie del gravel que va a rodar y puede ir desde el 35c y hasta el 50c en ciertas marcas.

Considerando el límite de 33c y al tipo de terreno en el cual se compite en ciclocrós (lodo, arena, nieve), las marcas suelen aplicar un amplio paso de rueda a sus bicicletas para evitar bloqueos al rodamiento. Por ejemplo, la Trek Boone (siguiente imagen) tiene un máximo paso de rueda de 38c y que es una medida muy respetada para el gravel.      

Trek Boone 5 2023; paso de rueda de hasta 38c, pero hay otras marcas que permiten más. Imagen: Trek.

Hay otras marcas que permiten un paso de rueda todavía mayor. La Super Six EVO CX de Cannondale (siguiente imagen) permite hasta 45c, sucediendo lo mismo con la Giant TCX.   

Dado lo anterior, a una bicicleta de ciclocrós podrás montarle sin problemas neumáticos tipo gravel (más anchas) para rodar con más comodidad.

Grupo

En cuanto al grupo también hay algunas diferencias. La principal es que las bicis ciclocrós montan grupos monoplato y las gravel pueden montar monoplato o dos platos, según la preferencia del ciclista. Las razones del monoplato en ciclocrós son simples: las velocidades tope no son tan altas (como sí lo son en el gravel) y debido el cambio constante de velocidades. Con dos platos pierdes valiosos segundos y además se corre el riesgo de caída de cadena entre platos.

La medida del monoplato en ciclocrós es de 40T, ubicándose en el rango de los monoplatos para el gravel; 40T a 44T, aunque hoy en día hay graveleros profesionales montando en competencia monoplatos de 48T.  

La SuperSix EVO CX de Cannondale trae un monoplato de 40T y cassette de 11-36T. Imagen: Cannondale.

En el cassette tampoco hay diferencia mayor. Las ciclocrós cassettes similares a las gravel y pueden ir desde un 11-36T y hasta un 11-44T. Ello dependerá de la marca. Por ejemplo: Cannondale monta un 11-36T mientras que Trek coloca en la Boone uno de 11-44T, al igual que Giant en la TCX.

Lo mismo sucede si se trata de un grupo electrónico o mecánico; en ciclocrós y gravel son muy similares, por no decir iguales. Esta característica dependerá del monto deseado a invertir.

Concluyo este apartado señalando que, si estás buscando entre bicicletas ciclocrós como tu futura gravel, solamente asegúrate de revisar su cassette. Si es un 11-36T quizá te quede corto para ciertas subidas. Afortunadamente el cassette lo puedes reemplazar y eso no es muy costoso.

Otros

Pasando a la diferencia en los accesorios o detalles tenemos que las ciclocrós poseen ojales solamente para dos bidones en cuadro al ser diseñadas para competencias de no más de una hora, eso sí, a todo gas. Afortunadamente, con la amplia variedad de bolsas y soluciones de carga como racks con bandas, podrás montarle lo que necesites para almacenar artículos. Lo mismo sucede con las loderas y de las cuales ya hay opciones para sujetarse en los tubos del cuadro o la horquilla.

Donde encontrarás algo de problema en las ciclocrós es en dos temas. El primero es en el material del cuadro. Hasta hace no mucho tiempo atrás las marcas los estaban fabricando también en aluminio y aquí podrás observar la TCX de aluminio modelo 2020. Hoy en día es difícil encontrarlas, pero las hay. Como ejemplo está la Cannondale CAADX o la Surly Straggler cuyo cuadro y horquilla son de acero, haciéndola toda una clásica del ciclocrós.  Esto hace que su precio de venta sea más accesible.    

Inflite CF SL 6 es la ciclocrós de Canyon y monta una guía en el plato para minimizar caída de cadena. Grosor máximo de nuemáticos; frente 45c y atrás 38c. Imagen: Canyon.

Otro detalle que difícilmente encontrarás en una ciclocrós es cableado completamente interno. Esto porque al ser bicicletas de competencia, los mecánicos deben ser capaces de arreglar cualquier desperfecto en el menor tiempo posible. Si esto no te quita el sueño, entonces puedes ignorarlo.  

Concluyendo

Algunas vez llevando mi Giant Revolt a mantenimiento con un distribuidor Giant cuando vivía en Tokio, estaba una TCX fuera de la tienda recargada en un barandal. Su cuadro era de carbono, sus neumáticos eran los oficiales 33c de grosor y con gajos y sus ruedas eran unas Giant SLR2 de 36mm de altura en las cejas. Se veía hermosa esa ciclocrós. Haciendo una analogía con animales, y seguro te sonará cursi, parecía un leopardo (ágil, rápida) mientras que mi Revolt se asemejaba más a un león (pesado, robusto).  

Siendo honestos y en ese momento quise más a esa TCX por sobre mi Revolt. Hoy la pienso dos veces.  

Surly Straggler, una ciclocrós clásica de solo 1,700 dólares o 1,550 euros. Imagen: Surly.

 Dado lo anterior, en lo personal no me disgustaría tener una ciclocrós como bicicleta de gravel. Sus cuadros son robustos pero ligeros a la vez, ya sea de carbono o de aluminio su cuadro. Son para rodar rápidos aunque su posición agresiva seguramente genera cansancio en recorridos de larga distancia. Además tendrías que vivir con un grupo 1x pues la mayoría de las marcas diseñan a sus modelos para montar monoplato.

Pero fuera de lo anterior, las ciclocrós son muy buena opción para usarlas como gravel. El asunto se vuelve todavía más tentador cuando estás buscando una bicicleta usada y encuentras una ciclocrós a muy buen precio. En una situación así, la compraría sin dudar.  

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